Peña Nieto, sello de la casa.

En sus primeros 100 días de gobierno, el presidente Enrique Peña Nieto ya puso el sello de la casa, al ejercer el poder desde un enfoque del priismo tradicional, en que no sólo su partido, sino la oposición y los gobernadores, se han sometido voluntariamente, al menos eso manifiestan, al proyecto de transformación del país, propuesto desde Los Pinos.

De este modo, Peña logró un marcado contraste sobre los 2 sexenios panistas que le antecedieron, el de Vicente Fox y el de Felipe Calderón, que en términos de resultados no respondieron a las expectativas del electorado y entre la población quedó la impresión de que 'no supieron gobernar'.

En contraste, a Peña le bastaron poco más de 3 meses para no dejar duda de quién ejerce el poder y dejar claro que su objetivo, tal como lo había anticipado, es el de ejercer una presidencia fuerte, de modo que con un claro respeto a la división de poderes, impulse los cambios trascendentales para el país.

De arranque, Peña promovió el llamado Pacto por México, que aglutinó en un acuerdo político-legislativo a los 3 principales partidos: PRI, PAN y PRD, que de entrada dio como resultado que fuesen aprobadas reformas de 'gran calado', como la laboral y la educativa, que habían pasado largos años en la congeladora del Congreso.

Cabe hacer notar que el proyecto de reforma laboral fue enviado de última hora por el expresidente Felipe Calderón, con el carácter de preferente, pero difícilmente hubiese transitado si el actual gobierno no la hubiese enmarcado dentro de la agenda del Pacto por México.



De este modo, la primera reforma de 'gran calado' enviada por Peña al Congreso, y aprobada por el mismo, fue la educativa, misma de la que derivó el 'golpe más espectacular' del nuevo gobierno: la debacle y posterior encarcelamiento de la lideresa magisterial: Elba Esther Gordillo.

El 'golpe' a 'la maestra' fue interpretado en los medios políticos, del sector privado e incluso del extranjero, como un claro mensaje en el sentido de que en el gobierno de Peña Nieto, y así lo manifestó él mismo, 'no hay intocables', y al propio tiempo constituyó una advertencia no sólo para otros dirigentes sindicales, sino también para otros de los llamados poderes 'fácticos', entre ellos algunos de los prominentes hombres de negocios que aparecen en la lista de multimillonarios a escala mundial que da a conocer la revista Forbes.

Telecomunicaciones: Slim vs Azcárraga

Si bien el 'corte de caja' que se puede hacer del arranque del gobierno de Peña Nieto, se ajusta a los objetivos trazados desde su campaña electoral, lo que se traduce en una buena aceptación por parte de la mayor parte de la población, el sector privado y los observadores e inversionistas del extranjero, en el corto plazo aparecen otros desafíos que no se presentan sencillos de superar.

En el terreno legislativo está, en primer término, la reforma de telecomunicaciones y la eventual sustitución de la Cofetel por un instituto autónomo que funcione de manera similar al Instituto Federal Electoral.

Esto ya es motivo de debate, pero entre los especialistas y legisladores lo que apunta en la materia es la disputa que observan entre 2 pesos completos de los negocios: de un lado Carlos Slim, en el terreno de las telecomunicaciones que representa un negocio de 30,000 millones de dólares anuales, y por el otro, Emilio Azcárraga, que desde Televisa es un jugador mayor en el terreno del entretenimiento con un rango estimado en los 7,000 millones de dólares por año.

Sin embargo, en los medios legislativos y empresariales se estima que, con ajustes y tal vez con alguna molestia de alguno de los 'pesos completos', la proyectada ley de telecomunicaciones saldrá adelante este mismo periodo de sesiones para dejar paso y no contaminar en el segundo semestre del año, la gran batalla que representarán las dos reformas clave para el gobierno de Peña, la energética y la hacendaria.

Al respecto, Peña ya dio un primer paso al erigirse como líder indiscutible de su partido: el PRI, y a partir de ello inducir cambios en sus estatutos, como los que eliminaron los 'candados' que impedían la modificación del IVA y el referente a la apertura de Pemex a la inversión privada, con lo cual estos temas entrarán con menos oposición tanto del tricolor como de otras fuerzas políticas al Pacto por México.

CNTE y economía de EU, señales de alerta

Pero antes de ello, el gobierno de Peña tiene que enfrentar 2 enormes riesgos como son la acción contestataria y belicosa de la Coordinadora Nacional de Trabajadores del Magisterio (CNTE), siempre opuesta al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), que ven en la caída de su gran enemiga, Elba Esther Gordillo, la oportunidad de incidir por medio de los paros de labores y la lucha callejera, en la política educativa del gobierno, una tradición de ese organismo al que incluso se le atribuyen vínculos con grupos extremistas que desde hace años operan en Oaxaca, Michoacán y Guerrero.

La CNTE ya dio una primera muestra de lo que se propone, con una marcha que desquició una amplia zona de la ciudad de México y concluyó frente a la residencia presidencial de Los Pinos, al tiempo que advirtió que era sólo el inicio de una 'lucha' que se extenderá a todo el país.

La otra señal de alerta es el impacto de los recortes por 85,000 millones de dólares que ordenó el Congreso de Estados Unidos al gobierno de Barak Obama, lo que hará decrecer la economía del vecino país del norte y se traducirá en menores volúmenes de exportaciones para México, disminución de flujos turísticos y mayor presión sobre las expulsiones de migrantes indocumentados, lo mismo que una baja en las remesas.

Débil alianza PAN-Panal en Baja California

A medida que se acerca la competencia por la gubernatura de Baja California, se fortalecen las posibilidades de triunfo de Fernando Castro Trenti, quien incluso anticipó que una vez que sea oficialmente candidato de su partido, convocará a todas las fuerzas políticas a un gran acuerdo estatal.

El pronunciamiento de Castro Trenti se hizo luego de que Edmundo Salazar, presidente del Panal en Baja California, renunció a ese partido y se unió a la precandidatura del priista. En el mismo sentido se movió Julio Rodríguez, del PRD, y Hortensia Hernández, lideresa de la Central Independiente de Obreros y Campesinos.

La alianza PAN-Panal se debilitó aún más con la adhesión a título personal de Gregorio Carranza, diputado local del partido Nueva Alianza, a la precandidatura de Castro Trenti.